lunes, 6 de julio de 2009

¿BATIDOS?

Para nadie es un secreto que los entrenadores de gimnasios conforman la principal fuerza de ventas de los suplementos nutricionales. Cada gimnasio de Lima vende un promedio de entre cinco y seis de estos productos por día, la cifra general puede generar ganancias de más de 20 mil dólares en una cadena de gimnasios. Es un negocio redondo. El problema es que se trata de productos que no son aptos para cualquier persona. Los suplementos proteicos son el segmento que mas crece en el mercado de la nutrición.
Se trata de productos, la mayoría en forma de polvo concentrado, que contienen grandes cantidades de proteínas y aminoácidos como el suero de leche, la albúmina de la clara de huevo y otros componentes esenciales como la glutamina o la creativa, que previenen la perdida muscular y proporcionan energía al organismo. En un principio estos productos estaban dirigidos exclusivamente a deportistas con una rutina física muy exigente, que entrenan para ganar mayor masa muscular, por lo cual necesitan consumir más energía de lo habitual. Sin embargo, en los últimos años el público que consume estos suplementos esta conformado virtualmente por todo aquel que asiste a un gimnasio: mujeres y hombres que acuden dos o tres veces a la semana para hacer ejercicios y mantenerse en forma. Hay gente incluso que los toma por que se los recomendó un amigo o su entrenador les dijo que tenían que probarlo sin considerar que existen ciertas restricciones para su uso. En general, los suplementos tienen una gama amplia de usos. Su uso y éxito dependerá de muchos factores, en primer lugar de la propia actividad física y lo segundo de la comodidad de cada persona. La gente cree que por el hecho de ser proteínas o vitaminas en polvo no hacen daño. Sin embargo si no son supervisados por un profesional de la salud pueden ocasionar efectos secundarios, algunos hasta fatales. Lamentablemente al ser alimentos procesados no necesitan prescripción médica y por eso se venden de forma libre. La gente se automedica con estos productos y los entrenadores los recomiendan sin supervisión, sin saber las consecuencias.
Todos los estudios han concluido que la alimentación de un deportista es igual a la de cualquier persona. Por eso no tiene sentido suplementar. Lamentablemente la mayoría de gimnasios hace un ejercicio ilegal de la medicina, vendiendo toneladas de estos productos sin hacer pruebas para saber si una persona es alérgica o sin indagar sobre el tipo de alimentación que tiene. Una sobrecarga de proteínas puede ocasionar daño renal y traer problemas serios. Por eso, a mi criterio solo basta con cambiar la dieta normal.Por lo general se piensa que la gente que necesita suplementos es porque sufre de alguna enfermedad o tiene un comportamiento alimenticio que produce una deficiencia de algo. Ahí están los niños inapetentes que requieren suplementos como sustagen o pediashure para obtener los nutrientes que necesitan para su crecimiento. Sin embargo, hay médicos que opinan que hacer ejercicio de por si ya es una razón suficiente para que nos nutramos de manera diferente. La suplementacion es beneficiosa si es que es utilizada de forma correcta. A las mujeres: a partir de los 35 años deben tomar suplementos de calcio para prevenir la osteoporosis, incluso muchos bebes toman suplementos cuando la mamá no puede darles de lactar. Es algo normal. Si un atleta, sea de la edad que sea, tiene un nivel de exigencia elevando, se debe suplementar.










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